Por Cristián Berríos
A estas alturas para nadie es un misterio
que Universidad Católica requiere de su mejor defensa – es decir con Cristián Álvarez
y Hans Martínez incluidos en ella – para evitarse más problemas de los
acostumbrados. Por uno u otro motivo, en esta temporada no se han desempeñado
uno junto al otro tantas veces como quisiera la hinchada y menos haciendo dupla
de centrales.
Como buen uruguayo, Martín Lasarte ha
confiado en la estatura de Enzo Andía. Desde la galería y tras los duelos
contra Unión Española y Cobreloa también se vería con buenos ojos el ingreso de
Valenzuela por derecha y la dupla Álvarez - Martínez para aportarle más viveza
a la defensa. También es cierto que el rival cambia semana a semana y no es lo
mismo marcar a un gigante que a otro más bajo y habilidoso, por eso tanto en la
vida como en el fútbol hay que ser flexible aunque firme en los principios.
En la vibrante semifinal de revancha por
Copa Chile, Sebastián Pol pudo hacernos más daño en Santiago con un remate o cabezazo sin que lo apuraran. Habría sido una
lástima porque fuimos superiores a Cobreloa, sin embargo los detalles definen
partidos y títulos. No puede ser que juguemos contra Unión y nos convierta Canales, contra Cobreloa y anote Pol, porque
tarde o temprano nuestro futuro en el campeonato dependerá de que anulemos a
Carlos Muñoz u otro referente de área. Ñublense carecía de un jugador así y
salvo por el empate parcial donde hubo varios errores defensivos demostraron
una y otra vez que no poseían la jerarquía necesaria para complicarnos más de
la cuenta.
Párrafo aparte para el gol de Ñublense:
Centro llovido de un jugador destapado, dos cabezazos dentro del área y nadie
cubre o anticipa a Riquero para que no rematara. Son cuatro errores en la misma
jugada perrito, y estás jugando por Universidad Católica en los tramos
decisivos de un campeonato. Si leyera los insultos de Patricio Rubio a los
hinchas o su ninguneo a la institución ¿Centran, cabecean dos veces y rematan
sin marca? Lasarte declaró en El Salvador que recién se enteraba de la cantidad
de años en los cuales no ganaba Católica ahí, luego esta semana supo de la
remontada del 2010. Como hincha siempre queremos que los funcionarios del club
se empapen rápidamente de su historia, aunque todos somos distintos. Estévez
por ejemplo fue a hablar antes del partido con Unión Española y perdimos. ¿Crees
que lo quieren ver de nuevo? No. Pero como es un presidente tiene que agarrar
una tonelada de revistas Estadio, videos y sentarlos un día completo para mostrarles
lo que es este club desde sus inicios. Con los cantos de la hinchada basta para
darse cuenta de lo grande que es Universidad Católica, pero el material de
apoyo nunca está de más. Los jugadores no necesitan una persona que les
recuerde la importancia de un partido porque eso sale en todos lados. Requieren un líder, un
ejemplo. Que lo miren y digan “No importa que este tatita sea babas tontas,
pero voy a matarme en la cancha por él”. Como no tenemos alguien así en la
presidencia o en la banca, sigan a Cristián Álvarez y hagan respetar la
historia de Universidad Católica tanto en la cancha como fuera de ella.
Nada más de Chillán. No cometamos faltas al
borde del área cuando el partido casi finaliza. La contundencia de Sosa y
Castillo ante Cobreloa y Ñublense para convertir el 3-1 en cada partido siempre
será bienvenida.
El asunto de Carlos Villanueva divide.
“Cuando entra en el segundo tiempo marca diferencias” Sí, pero no esperes a que
nos metan uno, dos o tres para que ingrese. Hay partidos donde marcas una
diferencia y luego juegas con el resultado. “Contra Cobreloa y Unión Española
entró desde el arranque y no anduvo bien” Ya, pero ¿En cuántos de esos partidos
jugó con Nicolás Castillo de titular?
Porque la gracia es darle pases a alguien que los cante, que abra el espacio,
que se desmarque. No se cansa nada dando pases gol. Si fuera Gerardo Reinoso
que gambeteaba a los rivales como Oliver Atton durante los noventa minutos, te
creo, pero el Piña ve espacios en la cancha que otros no percibirían ni con
esos lentes que usan los relojeros cuando ensamblan piezas pequeñas. Lasarte
debería ser claro, si usa a Peralta porque le sirve más cuando las líneas se
contraen o lo considera más colaborador, bien, si no le agrada Villanueva
porque juega muy arriba y obliga al volante mixto de turno a adelantarse para
armar el juego, bien, pero basta de pisarse la manguera entre bomberos. Que se
va a cansar. “Viene de una lesión” ya pasó, si el otro no estaba encadenado en
un calabozo como El Hombre de la
Máscara de Hierro. Los rivales de la final de Copa Chile lo
único que desean es que no empiece desde el arranque. Con los cordones mete un
pase gol y se va a agotar. Como se nota que nunca vieron a Néstor Gorosito, un
jugador de jerarquía superior pero un ejemplo válido si hablamos de
habilitadores. El Pipo Gorosito, aún en los últimos tramos de su carrera, poseía
mucha más presencia en la cancha que Carlos Villanueva, tenía el balón en los
pies 89 de los 90 minutos, pero no se desgastaba habilitando porque era un
elemento natural de su juego. Otros tienen que correr 30 metros , chocar y al
final entregan a un rival.
El encuentro del domingo asoma como una
oportunidad de reivindicarnos ante rivales más calificados. Hay que tomarse
revancha de ese 2-0 en San Carlos donde fuimos inmensamente superiores y no
ganamos sólo porque no contábamos con delanteros calificados para desempeñarse
en Primera División. Da lo mismo el momento futbolístico por el cual pasan
ellos, estos partidos son distintos y emocionantes, más en un estadio como el
Monumental donde Universidad Católica registra más triunfos que ningún otro
equipo visitante en Chile.
Les dejo los goles ante Ñublense:
Para terminar una acotación a los
productos que se venden en San Carlos: Los vendedores de maní tostado no pueden mezclar tanto perrito, me
salieron unos fosilizados, eran más antiguos que Luis Felipe Gazitúa en La Fundación. A
propósito de eso, este miércoles 17, Cruzados SADP llevará a cabo su Junta de
Accionistas y necesitamos que le bajen un poquito la usura a la concesionaria
para que contemos con más recursos a la hora de contratar. Hasta ahora La Fundación cobra 1000 UF
mensuales por el arriendo de San Carlos y el 1% de ingresos brutos anuales, más
otros derechos vinculados a la toma de decisiones como el veto. Planifiquen
como pelearán una Copa Libertadores o el Mundial de Clubes en vez de sacarle
dinero a la concesionaria y sobre todo a los hinchas.
Video de la semifinal ante Cobreloa:
¡Grande Católica!
No hay comentarios:
Publicar un comentario